- Hierve los tomates, luego remueve la piel. Hierve el maíz
- Corta el pollo en cuadritos, tamaño bocado.
- Calienta una olla con dos cucharadas de aceite de oliva y dora ahí el pollo.
- Añade la cebolla, el ajo y el perejil picados y adhiere sal y pimienta al gusto.
- Cuando esté tierno todo lo anterior, añadir el tomate rallado; luego cubrir con agua caliente y tapar la olla.
- Agrega los granos del maíz y deja que se siga cociendo otros 15 minutos.
- Ahora ponle el pollo.
- 2 pechugas de pollo sin piel
- 2 tazas de granos de maíz
- 1 cebolla
- 2 tomates
- 2 dientes de ajo
- 2 cucharadas de perejil picado
- Sal y pimienta
- Pimentón dulce
- Aceite de oliva
Hoy que México está inmerso en una epidemia de obesidad y diabetes, desde luego que tenía que nacer una versión más sana de este delicioso platillo.
Una receta no tiene alma, es el cocinero quien debe darle alma a la receta.