Diabetes y tabaquismo, todo lo que tienes que saber
Si tiene diabetes y fuma, será más difícil controlarla y habrá más probabilidades de sufrir problemas de salud graves derivados de la diabetes.
15528
post-template-default,single,single-post,postid-15528,single-format-standard,bridge-core-2.2.1,vcwb,ajax_fade,page_not_loaded,,transparent_content,qode-theme-ver-20.8,qode-theme-bridge,qode_header_in_grid,wpb-js-composer js-comp-ver-6.1,vc_responsive,elementor-default

Diabetes y tabaquismo, todo lo que tienes que saber

Diabetes y tabaquismo, todo lo que tienes que saber

“Dejar de fumar es la medida preventiva más importante que existe en la actualidad, superior al uso del preservativo o de cualquier tipo de vacuna”.

No es cualquier ‘cosa’, según un estudio conjunto del 2018 entre el Instituto Nacional de Salud Pública, Centro de Investigación en Evaluación y Encuestas, Instituto Nacional de Salud Pública y la Dirección de Investigación, Instituto Nacional de Cancerología, el 33.36% de los diabéticos en México fuman, en comparación con 45.06% de los no diabéticos. Los efectos de esta tendencia, son, simplemente, desastrosos.

Duplo nefasto: fumar propicia la diabetes y la diabetes empeora al fumarLas cifras son contundentes. La mortalidad causada por el tabaquismo se duplica en el caso de padecer diabetes, como apunta un estudio de la Universidad de Colorado. A su vez, el tabaquismo tanto activo como pasivo incrementa la incidencia de diabetes tipo 2.

Pero, ¿Por qué sucede esto?

El tabaco provoca alteraciones en la sangre y vasos sanguíneos, de manera que si se asocia a la alteración del endotelio que provoca la diabetes, aumenta el riesgo de sufrir complicaciones macrovasculares que resultan muy perjudiciales para la salud.

¿Por qué fuman los diabéticos?

La respuesta es individual en cada caso. Lo que sí se sabe, es que aparentemente el consumo de tabaco reduce la ansiedad ya que genera dopamina en el cerebro, la misma sustancia asociada a la recompensa, por lo que es placentero (pero en realidad, genera más ansiedad). A su vez, se tiene la errónea creencia de que el tabaquismo promueve el tener una mejor figura, pero esto es solo aparente, ya que, lo que sucede es que al consumir tabaco genera la acumulación de la grasa abdominal.

Cuando ya se tiene diabetes y se fuma

Enlistamos algunas de las complicaciones que se generan a partir de la combinación de sufrir diabetes e ingerir tabaco. Sus efectos negativos invitan verdaderamente a la reflexión:

·       La nicotina, en el descontrol metabólico de la enfermedad: el tabaquismo incrementa la severidad y frecuencia de las complicaciones micro y macrovasculares de los pacientes con diabetes que tienen mayor dependencia del tabaco y tres veces más probabilidades de morir de enfermedades cardiovasculares.

·       Fumar produce incremento de los niveles de glucosa séricos y dificulta el control de la diabetes.

·       Los fumadores diabéticos tienen tres veces mayor probabilidad de morir debido a una enfermedad cardiovascular que los diabéticos no fumadores.

·       Fumar aumenta la resistencia a la insulina, empeora el control de la diabetes, e inclusive puede inducir la enfermedad.

·       Estudios prospectivos señalan que la mortalidad total y cardiovascular en diabéticos que fuman es mucho mayor que en aquellos que no fuman.

·       En personas con Diabetes mellitus tipo 2 (DM2), la ingestión de nicotina reduce importantemente la sensibilidad a la insulina.

·       El tabaquismo constituye un riesgo añadido de enfermedad cardiovascular y otras causas de muerte en diabéticos.

·       Los niveles de ácidos grasos libres en sangre, derivados originalmente de las grasas, pueden estar elevados en los fumadores; compiten con la glucosa como fuente de energía para abastecer los músculos, contribuyendo con ello a la insensibilidad a la insulina.

·       Por lo general, los fumadores de tabaco muestran varios indicadores del síndrome metabólico, como obesidad abdominal, hipertensión arterial sistémica (HAS), resistencia a la insulina e intolerancia a la glucosa.

·       En poblaciones pequeñas con DM1 se ha confirmado que la falta de control de la glucosa en sangre, así como el hábito de fumar, desempeñan un papel importante en el desarrollo de la neuropatía.

·       Se ha demostrado que los fumadores crónicos sufren una función anormal en el hipotálamo relacionado con el aumento de peso y la obesidad. Esto influye en la acumulación de grasa alrededor de los órganos abdominales y, en consecuencia, en el mayor riesgo de desarrollar resistencia a la insulina o intolerancia a la glucosa.

·       La sobreactivación del sistema endocannabinoide va asociada con la obesidad y trastornos metabólicos; y este sistema está asociado con la dependencia nicotínica en fumadores.

·       Los niveles elevados de colesterol, HAS y tabaquismo en la edad adulta pueden aumentar de manera importante el riesgo de demencia senil.

·       Las personas con diabetes tienen un mayor riesgo de depresión, 14%, que la población general, 3 a 4%.5

·       La neuropatía diabética afecta directamente a los nervios de una persona y el tabaquismo provoca lesiones nerviosas, por lo tanto se pueden producir daños en los nervios de los brazos y piernas con efectos como dolor, debilidad o adormecimiento de las extremidades.

·        

¿Buena o pésima relación? La respuesta se obvia a sí misma.

*Fuentes:

Diabetes Mellitus en México, el estado de la epidemia/ Centro de Investigación en Evaluación y Encuestas, Instituto Nacional de Salud Pública y la Dirección de Investigación, Instituto Nacional de Cancerología. México DF, México

Tabaquismo y diabetes, María Guadalupe Fabián San Miguel y Carlos Cobo Abreu

Tabaquismo y diabetes, una mala combinación Revista chilena de enfermedades respiratorias